Ir al contenido principal

De hermanos




Tenemos que llegar antes de que lo mate. ¿Sí? Pues sí ni modo de dejar que le pegué un tiro, no seas cabrón. No se lo da. No sé, ha estado muy nerviosito en los últimos días; ya ves, ayer andaba mirando a todos lados que porque lo venían siguiendo y cual. ¿Y apoco carga pistola? Ah, ni idea si la carga, pero de que tiene… tiene. ¿Apoco? Sí, hace como un mes me dijo “mira lo que me compré, güey” y que le digo “qué” y que saca una pistola: yo no sé nada de pistolas pero no era de esas grandes, más bien digamos pequeña. Igual mata. Igual. ¿De dónde la sacó? Ya ves cómo es, le da vueltas a todo, nada más me dijo que un primo se la vendió. Ah. Y cuando le pregunté que cuál primo y para qué quería una pistola, me salió con que iba a matar a un pendejo. A chinga. Eso dijo. Pero ¿a quién va a querer matar ese cabrón y como porqué? Eso le dije: “¿a quién quieres matar, pendejo?” ¿Y? Nada. ¿Como nada? Pues eso, no dijo nada, prendió un cigarro y se fue. Qué raro…  No te creas, anda raro desde hace un par de meses. ¿Ya casi llegamos? Es aquí a la vuelta, en el edificio más viejo que veas, ahí vive al que va a matar. ¿Y tú cómo sabes? No sé, solamente me dijo que en la azotea del edificio lo iba a esperar que porque tiene que llegar a eso de las 3 de la tarde. ¿A qué? Dice que se sube a fumar ¿Y qué hora es? Diez para las tres. Apenas. Sí. Pero apoco crees que sí vaya hacer algo. No creo, te digo que no sé ni quién es al que quiere pelar; pero por eso te traje porque si en una de esas es cierto, hay que detenerlo. Pues eso sí. Es aquí. ¿Está abierto? Sí, siempre está abierto este edificio por eso no hay bronca para entrar. Ah. No hagas ruido que hay una señora bien loca, nos ha corrido un montón de veces con escoba en mano y a amenazando con que va hablarle a la policía, pero nada que les llama, pura finta; siempre andamos por estos rumbos y hay veces que nos metemos aquí para jalarle las patitas al diablo. Ya han de tener su macetita con el pastito vacilador, cabrones. No me hagas reír que sale la ruca.

No ha llegado. No. ¿Qué hora es? Las tres en punto. Pues ya no debe tardar, a ver, asómate para ver si no viene. No, no viene nadie, se me hace que te choreo; te digo que ese güey no va a matar a nadie, no tiene enemigos, es más si hay alguien al que mataría sería a ti. Nah, es mi carnal. ¿Y qué, güey? No nos matamos entre carnales. Pero si te estas tirando a su vieja. No hay drama, no pasa nada, igual si un día se entera pues a lo más me dejaría de hablar y ya esta. No sé. Aparte soy el mayor y se chinga. Ahí viene, güey. ¿Neta? Sí, güey. ¿Solo? Ey. Pues hay que esperar a que suba a ver qué se trae el cabrón.

-¿No que ibas a matar a no sé quién, pendejo?

-Y sí… a eso mismo vine, rata.

Tres tiros en el pecho. ¿Y qué más? Nada. No te hagas, pendejo, quién fue el que lo mató o te enjaretamos el muertito a ti por listo. No más vi que cuando lo mató, aventó la pistola y hecho madre se bajó las escaleras. ¿Y tú qué hiciste? Nada, me dio miedo y me tiré al suelo. ¿Y luego? Nada. ¿Nada? Pues eso.

Comentarios

Entradas populares de este blog

SEGUNDO NÚMERO DE LA REVISTA MONOLITO

Les comparto la portada del segundo número de la revista literaria Monolito . El arte en portada es del artista plástico José Molina Jule (El Salvador) con su obra Verdugos de Magdalena. En el número 2 de la revista Monolito encontrarán el ensayo de Gerardo Bono González (México) llamado “El libro sobre la silla” en donde el autor inicia cuestionándose: “¿Debe haber un libro en la silla presidencial? ¿Qué repercusión tienen las lecturas de un primer mandatario en la toma de definiciones? ¿Quiénes gobiernan mejor, los presidentes que han leído, por lo menos a los clásicos, o quienes definitivamente no han recurrido a la literatura para ampliar su acervo cultural?”. Con las letras aún de luto, el escritor y poeta Alejandro Montaño (México), escribe desde lo más profundo de su alma “Carlos: escritor de pluma fuente” a manera de ensayo-descargo por la partida de Carlos Fuentes. Javier Sachez (España) cruza el océano para ofrecernos una reseña literaria acerca del ...

REVISTA LITERARIA MONOLITO

Con una idea clara nace un proyecto nuevo de revista literaria. Necesitamos, urge, que este país (México) cambie su mentalidad. Debemos acercar la literatura a la gente que entiende por libro algo inalcanzable y difícil. Acerquemos a las personas de a pie las letras para que se den cuenta de que éstas existen, no muerden y, sobre todo, que aprenderán y se divertirán al mismo tiempo. Esa es una forma de contribuir para el mejoramiento de esta sociedad. Evidentemente, con una sociedad más culta, tendremos mejores gobernantes, pues sabremos escogerlos mejor. Dejemos que cada persona se eduque en base en lo que la cultura puede ofrecerles: en este caso la literatura. Bajo estos ideales nace la revista literaria gratuita Monolito . La fecha de salida será el 2 de mayo. Arte de portada: La casa amarilla de Sergio Astorga. Para colaborar en el terreno de relato, microrrelato, poema, ensayo, reseña literaria, pintura y escultura, ponemos a su disposición el siguiente correo e...

Carta de Julio Cortázar a Octavio Paz: el encuentro con la inmortalidad

Dejé la taza de té sobre la mesilla y al olvido el ardor de garganta con la que he convivido toda mi vida, abrí entusiasmado el tomo dos de Cartas1955- 1964 de Julio Cortázar (editado por la inalcanzable Alfaguara –hablando en pesos). El tomo uno descansaba exhausto en el librero después de haberlo hecho mío por un par de días. Allí Cortázar sigue siendo joven: profesor normal, catedrático, hombre de viajes por el interior de la Argentina, de dolores por la pérdida de amigos queridos; risas, misivas llenas de humor; poemas, lecturas; Presencia y su seudónimo Julio Denis. Cocó. La otra orilla , El examen . Su tan querido Keats al que le dedicaba muchas horas y del que tanto hablaba. Su tan citado Rilke; aquellas primeras apariciones importantes en Sur . Besteario ; el descubrimiento de los divertidos Cronopios y hasta una carta del fantasma de su padre pidiéndole que firmara en el futuro como Julio Florencio Cortázar y no como Julio Cortázar ya que podrían confundirlo co...